martes, 14 de febrero de 2012

La obra de Elias Valiño, "El Cura de Cebreiro".

Hace más de 30 años, en un inhóspito lugar de los Pirineos, una patrulla de la Guardia Civil observaba sorprendida a un hombre de mediana edad, enfundado en su vestimenta de sacerdote, mientras pintaba flechas de color amarillo de considerable tamaño en los cruces de los caminos. Los agentes le pidieron que se identificase y que les explicase lo que estaba haciendo. Elías Valiño Sampedro respondió convencido: "preparando una gran invasión a Galicia".

Así fue el trabajo del ya fallecido 'cura del Cebreiro', como quería que le llamasen, a favor de las rutas que los peregrinos siguieron históricamente para abrazarse al Apóstol Santiago. La red de colaboradores que este sacerdote fue creando se convirtió en la semilla de las diferentes asociaciones de amigos del Camino.

El trabajo llevado a cabo por el sacerdote en los años 70 en la montaña lucense le permitió entrar en contacto con los obreros que por aquel entonces se encargaban de unir Galicia con la meseta. A ellos fue a quien les pidió la pintura para señalizar el camino y de ahí el origen de la flecha que hoy recorre las rutas de todo el mundo.

Al impulso dado al Hospital y santuario de Santa María do Cebreiro se une su labor junto a familiares y amigos para señalizar poco a poco el Camino a Santiago. En los años 80 publica la primera guía y recorre parte de España difundiendo el peregrinaje y animando a la constitución de las asociaciones de amigos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario